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mayo de 2022
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En profundidad 5 min

La nacelle du Pearl 700 prépare son envol

El nuevo avión ejecutivo G700 de Gulfstream entrará en servicio a principios de 2023. Se trata de un programa estratégico para Safran Nacelles, que provee las góndolas para este avión bimotor. El ritmo de producción, las exigencias en materia de calidad, el soporte posventa… ¡Nada queda librado al azar! Una mirada entre bastidores de un ramp up bajo estricta supervisión.

A

l igual que el motor de Rolls-Royce que albergará como si fuera un joyero, la góndola del Pearl 700 es una joya de la tecnología, la última generación de góndolas para aviones ejecutivos de gran cabina y largo alcance. Para Safran Nacelles, se trata de un programa único en muchos sentidos. «Se trata de la primera góndola completa(1) que desarrollamos y fabricamos solos, señala Jean-François Gallardo, Director del Programa. También es la primera vez que equipamos un avión de Gulfstream, lo que implica contar con una certificación otorgada por la autoridad estadounidense de regulación de la aviación(2) en lugar de por su homóloga europea(3) como solía ocurrir en otros programas.»

Hay otra particularidad que no es menor: las entregas de serie han comenzado cerca de un año antes de la entrada en servicio, a pedido del fabricante de aviones, para garantizar su capacidad para realizar las entregas a sus propios clientes en los plazos previstos. Así, las primeras entregas comenzaron en marzo de 2022, aunque el avión no contará con certificación hasta fin de año. Además de su impacto en el calendario de producción, esta exigencia también se traduce en la necesidad de actualizar las góndolas entregadas antes de la certificación. «En concreto, explica Jean-François Gallardo, tendremos que «modernizar» varias decenas de góndolas, lo que implica la puesta en marcha desde ahora de una unidad específica en las instalaciones del fabricante de aviones, en Savannah, en el estado de Georgia (Estados Unidos).»

«Más allá de los retos industriales que supone para Safran Nacelles, el programa Pearl 700 amplía la presencia del Grupo en Gulfstream, empresa líder en aviación ejecutiva.»

Jean-François Gallardo
Responsable del Programa Pearl 700

Un reto técnico…

Esta particularidad del programa ha llevado a los equipos de dirección técnica a participar activamente en el ramp up. «Solo tenemos tres meses para desarrollar el diseño detallado de la configuración de la certificación en el segundo semestre de 2022, anuncia Fabien Kermarrec, Jefe de Marcas Técnicas de Pearl 700. El desafío es reducir a la mitad el ciclo de diseño y validación en comparación con las configuraciones anteriores.» Los otros desafíos son la justificación de las concesiones de producción y los trabajos de erradicación asociados, así como la obtención de la certificación de la góndola, que involucra a todos los equipos para la redacción de unos 500 informes.

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…e industrial

En lo que se refiere a la producción, estamos trabajando desde finales de 2020. «En un primer momento, tuvimos que poner en marcha una sólida herramienta industrial en todos los centros que intervenían en la fabricación en Francia, Inglaterra y Marruecos, explica Jérôme Saclier, Responsable de Marcas Industriales de Pearl 700. Habíamos previsto varias fuentes de producción para repartir el esfuerzo y estar en condiciones de reaccionar en caso de imprevistos.» La cadena logística de Safran Nacelles se vio muy solicitada, con las limitaciones de la reanudación de las actividades tras la pandemia.

Las primeras fabricaciones en modo de pre-serie que se realizaron en Le Havre y Burnley en la primavera de 2021 proporcionaron un feedback que se transmitió al centro de Casablanca, a pesar de las dificultades relacionadas con la crisis sanitaria (y en particular pese a que las fronteras de Marruecos estuvieron cerradas durante más de tres meses). La preparación del ramp up, por su parte, consiste en la implementación de un análisis exhaustivo de la herramienta de producción y la realización de pruebas llamadas «boost tests», cuyo objetivo es identificar los ejes de mejora y controlar los riesgos relacionados con la consecución de los ciclos y ritmos de producción. De aquí a finales de 2023, tendrán que entregarse aproximadamente 230 góndolas, lo que supone multiplicar por 7 el ritmo de producción en un plazo de 8 meses. ¡Se trata de algo nunca antes visto en un programa de aviones ejecutivos! «Este ramp up es tan fuerte como el que tuvimos en el caso de la góndola del A320neo», señala Jérôme Saclier.

A este reto industrial se añade también el reto del montaje de la góndola, que, en el caso de un avión de un segmento muy alto, no puede tener ningún defecto. «La separación entre algunas piezas no debe exceder algunas décimas de milímetro, precisa Jérôme Saclier. En algunos componentes de ese tamaño, se trata de un ejercicio de muy alto nivel.»

A medida que empieza a verse la recta final, los equipos de Safran Nacelles siguen más comprometidos que nunca para estar a la altura de este programa clave.

(1) Las góndolas están compuestas de varios módulos: una entrada de aire, capós de los motores y un inversor de empuje.
(2) Federal Aviation Administration (FAA).
(3) European Union Aviation Safety Agency (EASA).

Nathalie Godin Marsat

Responsable del Programa de Servicio Posventa Pearl 700

«El servicio posventa se prepara mucho antes de la entrada en servicio. En concreto, se trata de redactar la documentación de mantenimiento que permitirá que los operarios realicen intervenciones simples («bajo el ala») en sus góndolas y que las estaciones de reparación realicen intervenciones más complejas. También hay que proveer herramientas y piezas de repuesto a nuestros dos centros de mantenimiento dedicados al programa, que se encuentran en Francia y en Estados Unidos. Por último, tenemos que entregar cierta cantidad de piezas de repuesto a Rolls-Royce y abastecer a nuestros propios centros para poder intervenir con rapidez en caso de urgencia (aviones en tierra) y garantizar unos tiempos de mantenimiento lo más breves posibles. Por supuesto, todo esto requiere el compromiso de nuestros proveedores (fabricantes de componentes y, en algunos casos, reparadores) de adaptarse a nuestro calendario. Esto resulta particularmente importante porque las exigencias de Gulfstream están muy por encima de los estándares actuales del mercado, tanto en lo que se refiere a la disponibilidad de las piezas como de los tiempos de reparación o de respuesta a cuestiones técnicas.»